El paso del fenómeno meteorológico ETA devastó muchas zonas de la región norte del país, situación que agravó la llegada de IOTA, continuando con inundaciones en distintos municipios, tal como Choloma, Cortés.
Edwin Navarro, poblador de Choloma, es uno de los miles de damnificados que perdieron todo producto a las torrenciales lluvias que provocaron las tormentas.
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Navarro no logró contener las lágrimas cuando narró a un medio local el drama que vive luego de que la residencial donde habitaba quedara bajo el agua e infestada por cocodrilos.
El ciudadano expresó que desea regresar a su casa, pero, indicó que, “da miedo ir a ver sus cositas porque todo está lleno de cocodrilos”.
Del mismo modo, aseguró que en la puerta de su casa vio algunos de estos reptiles, “quizá encontraron algo bueno y se quedaron”, agregó.
Residencial Los Castaños, hogar de Edwin, todavía se encuentra inundado, motivo por el cual solo se puede acceder a las viviendas en lanchas.
Además, las corrientes de agua llevaron basura hasta este sector, provocando malos olores causando que “sumergirse es un acto riesgoso para la salud”.
“En diez minutos se inundó todo, no nos dio tiempo de sacar nada, la ropa que ando, es la única que tengo, desde el 5 de noviembre, tengo dos hijos y ya también no se aguantan los asaltos en la zona”, lamentó Navarro.
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El hondureño quien a finales de este año cumpliría su séptimo aniversario de vivir en la zona, argumentó que hasta el momento las autoridades no se han presentado por lo que pide una pronta solución.
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