James Comey señala ante el Senado que el gobierno lo «difamó a él y al FBI»
El un proceso de destitución presidencial, conocido como impeachment, al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podría haber comenzado este jueves en el Senado de los Estados Unidos, con las declaraciones del exdirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI), James Comey.
Comey, fue despedido abruptamente hace un mes por Trump, después de que éste investigara al mandatario estadounidense por supuestos vínculos de la campaña del actual presidenciable con funcionarios rusos en los meses previos y posteriores a las elecciones presidenciales de noviembre de 2016.
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Las primeras declaraciones de Comey esta mañana fueron: «El gobierno decidió difamarme a mí y, lo que es más importante, al FBI».
Se informó que el Comité de Inteligencia del Senado está investigando la supuesta injerencia. Comey, siendo director del FBI, puso en aprietos a Hillary Clinton e investigaba los vínculos de la campaña de Trump con Rusia.
El experto fue despedido el pasado 9 de mayo por el multimillonario, un anuncio que estremeció a los Estados Unidos y a la geopolítica internacional.
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Se informó que el miércoles, antes de declarar, Comey envió al comité del Congreso su testimonio oficial describiendo todas las conversaciones privadas que mantuvo con el gobernante americano.
Entre las revelaciones de Comey, estaría que Trump le presionó en muchas ocasiones, y señala el pasado 27 de enero que en una cena privada en la Casa Blanca, el presidente le dijo: «Yo necesito lealtad, yo espero lealtad».
Este jueves Comey asintió que los presidentes tienen el derecho de despedir a un director del FBI en cualquier momento por cualquier razón «o ninguna» antes de terminar su período de 10 años. Aunque reveló que los motivos de su separación lo hicieron sentirse «confundido y cada vez más preocupado».
Añadió que cuando se enteró por los medios de comunicación que había sido separado de su puesto “no tenía sentido para mí”.
Después el gobierno dijo que su despido fue porque no era capaz de liderar el FBI y que no estaba haciendo bien su trabajo. A lo que Comey dice rotundamente que: «Esas fueron mentiras puras y llanas».
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