La situación provocada por la pandemia del coronavirus ha llevado a las iglesias a reinventar temporalmente la manera de llevar la palabra de Dios a sus feligreses y ha puesto en marcha las “automisas”.
Esta creativa modalidad conocida como “automisas” es llevada a cabo cuando los miembros de la iglesia acuden a la reunión religiosa en el estacionamiento del templo a bordo de sus vehículos.
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Al arribar al aparcadero los voluntarios entregan un folleto mediante una bolsa esterilizada y ubican a los automotores a seis pies de distancia, mientras que los asistentes pueden escuchar la prédica mediante los parlantes.
“Es un servicio más corto, porque sabemos que las personas están sentadas en us vehículos. Ha sido positivo y motiva a las personas en estos momentos de dificultad”, asegura un líder religioso.
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Sin embargo, al estar dentro de sus vehículos no podrán interactuar y crearon un sistema de comunicación, con el uso de las bocinas de sus automotores.
Un pitido significa: “Amén”; dos pitidos: “Gracias”; tres: “Alabado sea el Señor”, y un pitido largo quiere decir “Gloria a Dios”; de requerir asistencia solo enciende las luces de su carro.
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La innovadora reunión se lleva a cabo en Carolina del Norte, Estados Unidos, donde comenzó la reapertura inteligente de algunas ciudades incluyendo las iglesias.
Periodista y Redactor Web de Canal11 y Once Noticias Digital.
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