Una joven relata por las redes sociales que fue víctima de nueva modalidad de asaltos, en donde los ladrones fingieron ser víctimas, en el transporte público.
Según el relato de la mujer llamada Tatiana Moreno, ella abordo el transporte y saco su celular, cuando de repente comenzó a sentir una actitud sospechosa, de tres personas.
«Un sujeto venía observando mi celular constantemente, por lo que decidí guardarlo dentro del brasier”, recalcó Moreno.
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La chica aseguró que pocos segundos después, noto que en la puerta de atrás venía un sujeto bien vestido y que la observaba constantemente, por lo que le generó miedo.
“Una mujer que venía al lado mío de pie toca los bolsillos de su chaqueta y dice que le robaron el celular. Esta persona que parecía de oficina me señala y me culpa de haberle robado el celular”, destacó Moreno en sus redes.
Según su historia intentó explicarle a la mujer que ella no había hecho nada, y que en ese momento se desató un escandalo porque los dos hombres comenzaron a gritar y a acusarla de ladrona.
“Yo no sabía lo que pasaba, me giro hacia la supuesta víctima y le digo que no había tomado nada. La otra persona me tomó del brazo, agrede verbalmente y me dice que tenía que devolverle el celular a la señora porque vio que yo le quité el celular y lo guardé”, recalcó.
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De igual forma mencionó que los supuestos ladrones se memorizaron el color de la funda de su celular, la clave y el fondo de pantalla.
“Entendí que todo se trataba de un robo y mantuve una postura de no entregar mi celular hasta llamar a la Policía. Una persona gritaba e incitaba a los pasajeros para que me lincharan. Decía que me tenían que golpear o sacar el celular a la fuerza” destacó.
El hecho se llevó a cabo en Colombia, en el que momentos más tarde el bus se paró en la estación, y las personas continuaban amenazando a Moreno con cortarle el cabello sino entregaba el celular.
“Temí por mi bienestar, creí que la gente me iba a agredir físicamente” recalcó Moreno.
Mira el video:
Llegaron los agentes de la policía, comenzaron a decirle que la mujer era una ladrona, pero ella en crisis les pidió que los agentes que le dieran la oportunidad de demostrar que el celular era de ella.
Seguidamente comenzó a mostrar fotografías de ella con su esposo y familia, la supuesta víctima comenzó a llorar y a decir que era una confusión.
Moreno concluyó en redes sociales diciendo que temía por su integridad y reputación ya que varias personas grabaron.
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