En la coronación de Carlos III como el nuevo rey de Inglaterra, el soberano utilizará dos coronas, incluyendo la más preciada de la monarquÃa británica, la corona de San Eduardo.
La Corona de San Eduardo es colocada por única ocasión en la cabeza del rey en su coronación, esta fue utilizada por última vez hace setenta años por la Reina Isabel II.
El Rey Carlos II mandó su creación en 1661, luego de la restauración de la monarquÃa, entonces el reino se vio en la necesidad que tener nuevas joyas para coronar al nuevo monarca.
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La corona contiene incrustaciones de 3,093 piedras preciosas, con 2,783 diamantes; 17 zafiros; 277 perlas; 11 esmeraldas; 5 rubÃes y algunos turmalinas, amatistas, topacios y citrinos.
Dicha maravilla es considerada como una de las piezas más importantes de las joyas de la monarquÃa británica y expertos prevén que podrÃa estar valorada en 4 millones 519 mil 709 dólares.
Luego de la misa en la AbadÃa de Westminster, el que esté en el mando jerárquico más alto de la realeza portará la corona del Estado Imperial, para saludar a los visitantes desde el balcón.
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La corona Imperial creada en 1838 para la coronación de la Reina Victoria, pesa 1,28 kilos y se compone de cuatro diademas con 2,868 diamantes; 273 perlas; 17 zafiros; 11 esmeraldas y 5 rubÃes, portando en la parte superior una cruz plateada.
Por su parte, la reina consorte Camilla, no portará la corona de la Reina Madre, sino que utilizará la que llevó la bisabuela de Carlos III en la coronación de Jorge V.
Redactora de Once Noticias Digital.
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