Benedicto XVI; el Papa que renunció después de 8 años

Joseph Aloisuis Ratzinger nació el 16 de abril de 1927 en Marktl, una villa de Alemania cercana a la frontera con Austria, creció en una familia católica y desde niño su vida estuvo marcada por dicha religión la cual llegaría a dirigir 78 años después, cuando en 2005 lo nombraron el sucesor de Juan Pablo II, adoptando el nombre de Benedicto XVI y se mantuvo en el cargo por 8 años hasta que en 2013 dio a conocer la noticia que sacudió al mundo, su renuncia.

En 2013 Benedicto XVI se dirigió en conferencia de prensa en la cual anunció su dimisión y tiempo después se informó que pasaría a ser un Papa emérito y se retiraría a una residencia vaticana dando paso a la elección de un nuevo líder de la iglesia en la cual, Jorge Mario Bergoglio, obtuvo los votos necesarios.

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A pesar de que su papado será recordado por su decisión de renunciar, su vida hasta convertirse sentarse en el trono de San Pedro lo puso a prueba, obligado a los 16 años a estar en las filas del ejército de la Alemania Nazi en la Segunda Guerra Mundial, lo capturaron en combate en 1945 al final del conflicto bélico.

Considerado un hombre inteligente alcanzando ser teólogo, Ratzinger, creía que “el marxismo y el liberalismo penetraban la pureza y la concepción de los dogmas en la fe católica”, explicó el sociólogo, Bernardo Barranco.

Su servicio sacerdotal lo llevó a ser arzobispo de Múnich y Frisinga en 1977 y poco después cardenal, 5 años más tarde Juan Pablo II lo llamó a Roma para que asumiera la prefectura de la Congregación para la Doctrina de la Fe.

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Tras la muerte del Papa viajero el cónclave para decidir a su sucesor no tuvo mayores atrasos y un 19 de abril del 2005, a sus 78 años asumió el liderazgo de más de mil millones de católicos y en 2013 hizo lo que no sucedía hace más de seis siglos.

Es importante señalar que el Papa Francisco no descartó la posibilidad de también él renunciar su salud no estaba en condiciones y señala que no es una catástrofe cambiar de Papa “no es un tabú”.