El portugués convirtió un doblete frente al Apoel de Chipre para iniciar con pie derecho su camino a revalidar por tercera ocasión el título
El regreso con gol de Cristiano Ronaldo, con hambre de éxito tras un mes sin poder jugar con el Real Madrid, dio luz a una noche europea sin brillo, en un estreno plácido del campeón ante el modesto APOEL, que cedió al doblete del portugués y un tanto de chilena de Sergio Ramos, que levantó de sus asientos a todos los aficionados madrileños en el Bernabéu.
Necesitaba de golpe un buen partido el Real Madrid tras dos empates consecutivos en Liga como local que dejaron unas dudas inesperadas tras el nivel mostrado en ambos partidos de la Supercopa Española. No llegó en un día propicio, ante el humilde APOEL que luchó con todo lo que tenía pero que está a años luz del equipo de Zidane, al que por momentos le faltó intensidad y mentalidad.
El problema de la falta de fútbol responde más a lo psicológico que lo físico. Es cuestión de motivación. El estreno europeo debía levantar el ánimo. Una goleada es siempre bienvenida y para ello regresaba el mayor devorador, Cristiano Ronaldo, con ganas contenidas durante un mes sin poder defender al Real Madrid.C
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Que marcaría lo sabían los chipriotas y el mundo entero. Lo había hecho en el primer partido de las cinco últimas ediciones y no faltó a la cita en la sexta. Aunque antes llegó un susto para Keylor Navas con un disparo lejano de Roberto Lago, que dobló sus manoplas para enviar al tiro de esquina. El APOEL tuvo dos llegadas seguidas repletas de ilusión antes de ser castigado con el martillo pilón del portugués.
Uno que ha sufrido con la inesperada salida de Karim Benzema es Gareth Bale. El galés sigue sin poder encontrar su ritmo de ‘9’ y la paciencia se le acaba al técnico galo que ya no sabe en que posición ubicar al jugado tasado en unos 200 millones de euros. Este marcador de 3-0 ayuda a la moral de un equipo joven que ha sufrido en el primer mes de competencia en el fútbol europeo.
Este fin de semana los merengues se tendrán que visitar al siempre peligroso Real Sociedad, en una prueba de fuego a nivel deportivo para el club que hizo la menor cantidad de incorporaciones para afrontar una dura Liga Española y Champions League.
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