Tamra Maiochi tuvo un accidente mortal en casa de unos amigos al terminar el tercer partido de Brasil en la Copa del Mundo de Rusia.
Brasil le había ganado a Serbia 2 a 0 y había sellado su pase a octavos de final del Mundial de Rusia como líder de su grupo. Todo era felicidad para Tamra Maiochi y sus amigos, quienes se habían reunido en una casa en Itatiba, estado de San Pablo, para ver el partido de la verdeamarelha.
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Al terminar el partido, el grupo de amigos estalló de alegría y comenzó a festejar el pase a la próxima fase del Mundial. Tamra, de 30 años, estaba sentada en un sofá. En una mano sostenía su teléfono móvil, y en la otra una copa de vino.
Cuando el árbitro finalizó el encuentro, la joven saltó del sofá para celebrar y perdió el equilibrio. Lo más cerca que tenía era la mesa. Al resbalar se apoyó sobre ella. Pero en su mano todavía tenía la copa de vino, que inmediatamente se rompió.
Pedazos de vidrio volaron en la sala, y con tanta mala suerte uno de ellos penetró en el cuello de Tamra, específicamente en la yugular.
Sus amigos rápidamente intentaron detener el sangrado envolviendo su cuello con toallas.
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Sin embargo, según consigna Daily Mail, cuando llegaron los servicios de emergencia la joven ya estaba muerta.
En una de sus últimas publicaciones en redes sociales, Tamra advertía sobre los riesgos de usar el teléfono móvil al conducir: «Nunca imaginamos que algo como esto nos puede pasar. Pero los accidentes suceden».
«En mi religión, espiritismo, creo que todo sucede por una razón», agregaba su mensaje. El cuerpo de la joven fue trasladado a Conchal, su ciudad natal, en San Pablo, donde este jueves se llevó a cabo su funeral./Infobae
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