Doce estudiantes presuntamente "endemoniados" en Choluteca

ONCE NOTICIAS habló con el director del colegio donde un grupo de alumnos sufren desmayos, ataques de pánico y otras manifestaciones, tras jugar la güija.

Luego que trascendiera información de doce estudiantes presuntamente endemoniados por jugar la güija en la comunidad de Soní, El Triunfo en el departamento de Choluteca, investigamos qué es lo que realmente está sucediendo y por qué tiene atemorizados a los alumnos del instituto Francisco Morazán.

Esto es lo que sucede con los 12 estudiantes supuestamente «endemoniados» en Choluteca.

También afirman que estos estudiantes están poseídos por entidades demoníacas y estos les provocan ataques de pánico, desmayos y otras manifestaciones aparentemente sobrenaturales.

Por su parte, Fredy Cárcamo López, director del centro educativo Francisco Morazán, explica que la extraña situación no sucede en la institución, sino que son alumnos del centro educativo los que presentan estas extrañas condiciones de salud de desmayos, nervios y temblores.

Los estudiantes han recibido oraciones por parte de líderes de la iglesia de la comunidad, y al momento de los rituales religiosos estos mostraron síntomas sobrenaturales.

Los jóvenes no han querido revelar qué es lo que experimentan y se mantienen en profundo silencio, sin brindar ningún tipo de información sobre lo que les sucede.

El director dijo que son doce los estudiantes afectados, incluyendo una ex alumna que egresó del centro el año pasado.

Las clases en el centro no se han llevado con normalidad, ya que a la institución no están llegando los alumnos por el extraño fenómeno que afecta la comunidad.

«Los alumnos no están llegando a clases por temor a lo que está sucediendo», señaló el director.

Los jóvenes están siendo atendidos por la doctora Clara Laínez, directora de la clínica del adolescente. Además recibieron la visita de la psicóloga Alma Lozano, quien los escuchó y posteriormente dará un diagnóstico para determinar como pueden apoyarle los líderes religiosos que se encuentran en constante oración por la vida de estos jóvenes.