El día de mañana el técnico asturiano Luis Enrique estará por última vez al frente del banquillo blaugrana, pero dice que estará presente apoyando al equipo el próximo año
El entrenador del Barcelona, Luis Enrique Martínez, reconoció este sábado que el partido ante el Eibar, el último que vivirá en el Camp Nou, será “especial” porque supondrá su despedida, aunque reiteró que más que un adiós, “es un hasta pronto”.
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“No le daré especial importancia porque el año que viene estaré sentado en mi localidad de socio”, explicó el asturiano, que también admitió sentirse “un privilegiado” por haber podido dirigir al Barça durante tres temporadas. “Ha sido un viaje corto, pero eso ya lo sabía cuando lo empecé”, confesó en conferencia de prensa Luis Enrique.
«En un club como este, todo te parece corto porque todo sucede con celeridad y pasión: estoy super orgulloso de haber formado parte de esta historia y de haber dado mi máximo; estoy agradecido al Barça por haberme permitido estar ocho años como jugador y seis como entrenador, tres en el filial y tres en el primer equipo», continuaba comentando un estratega que ganó todo con el club catalán.
El entrenador del Barça también reseñó la importancia de haber sido capaz de elegir el momento de su despedida. “Yo decido parar y descansar porque lo considero necesario: hay que procurar buscar el lado positivo de todas las situaciones, es lo que he hecho con mi vida desde que soy jovencito y me ha ido bien. Tendré morriña por todo lo que he vivido, pero todos los recuerdos que tengo son positivos”. El Barcelona sigue con posibilidades de llevarse el título de liga con una victoria en casa y una derrota del Real Madrid en la rosaleda.
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