Trans 450: Mil millones de lempiras demolidos por pedazos

 

Sólo escombros van quedando de la obra que supuestamente modernizaría el transporte público en el casco urbano de Tegucigalpa.

El Trans 450, que prometía ser el proyecto que modernizaría el sistema de transporte público de Tegucigalpa, se convirtió en una de las peores inversiones gubernamentales realizadas en la historia de nuestro país, no sólo por haber quedado inconclusa, sino porque está siendo destruida a pedazos y el país debe asumir el pago de la millonaria deuda que ahora.

El proyecto empezó a construirse durante la gestión edilicia de Ricardo Álvarez, con la aprobación de un préstamo inicial de 30 millones de dólares que otorgó el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el cual fue avalado por el gobierno central y la comunidad capitalina.

De acuerdo a los planes, el novedoso sistema de movilización masiva de personas en el área urbana, vendría a modernizar y mejorar las condiciones del transporte público de pasajeros y, el tránsito vehicular en particular, de la capital hondureña.

En entonces alcalde (Álvarez) señaló en su momento que el Trans 450 sentaría las bases para lograr que Tegucigalpa fuese una ciudad competitiva, eficiente y moderna, que ofreciera oportunidades de movilidad sostenible a la población de menores recursos y facilitara el transporte hacia los centros de trabajo y las zonas desarrollo económico y social.

Este moderno sistema de transporte público, conocido como Bus de Tránsito Rápido (BTR), es considerado en otros países como una de las mejores prácticas de traslado de personas, por su combinación de bajo costo y alto impacto social.

Los autobuses serían articulados, de aproximados 18 metros de longitud, con capacidad para 160 pasajeros, con alta tecnología de acceso, cámaras de vigilancia, centro de control y comunicaciones.

La eficiencia y rentabilidad de los BTR se debe a que utilizan buses de alta capacidad de movilización de personas para atender los corredores principales (troncales), y buses más pequeños que recogerán a los pasajeros en zonas residenciales (alimentación) para trasladarlos a las terminales.

La primera etapa fue inaugurada en enero del 2014 por el entonces alcalde Ricardo Álvarez, días antes de entregar la comuna a Nasry Asfura.

En vista de que la alcaldía capitalina quedaba en manos de otro nacionalista, todo indicaba que el proyecto del Trans 450 sería concluido y empezaría a operar sin demoras. Sin embargo, Tito Asfura y su cuerpo de regidores consideraron que la obra vial estaba mal diseñada y no solucionaría el problema del transporte de la ciudad, sino todo lo contrario, que lo empeoraría.

Fue así como “Papi a la Orden” ha ido demoliendo por partes el millonario proyecto.

Ahora solo se ven grandes rocas y tierra de lo que, para el colmo, nunca empezó a funcionar. Al final, la inversión en el Trans fue de 45 millones de dólares, o sea, más de mil millones de lempiras.

Los funcionarios del BID informaron que a partir del 2017 Honduras debería empezar a pagar un poco más de 900 mil dólares mensuales, más o menos unos 21 millones de lempiras en concepto de pago de intereses y capital del préstamo otorgado.

Personeros del organismo multilateral indicaron que esta obra mantendrá atadas las finanzas del Estado hasta el año 2040.

No se ha desechado

El futuro del Trans 450 es incierto. Aunque los encargados aseguran que arrancará dentro de un año, un mar de dudas entre la población. Las preguntas que priman entre los capitalinos son: ¿Qué pasa con el Trans 450 y cuándo comienza a operar?, pero las respuestas no llegan.

El proyecto se encuentra paralizado y se ve como una vía de recreo que es utilizada por los ciudadanos para caminar, hacer ejercicio, practicar el ciclismo o pasear a sus mascotas el fin de semana, pero menos para la movilidad de personas o ayudar a descongestionar la ciudad.

La operación de las unidades articuladas se ha dilatado por falta de acuerdo entre transportistas que se encargarán de la operación de las unidades articuladas y el gobierno local.

Informe legislativo

Una comisión multipartidaria de diputados presentó un informe de la obra en el que concluyen que el Trans 450 presenta apenas un avance del 30%, por lo que su inicio todavía es incierto.

El diputado mocionante, Rassel Tomé, dijo que el proyecto está salpicado de irregularidades y que el informe debe remitirse a la Fiscalía General de la República y al Tribunal Superior de Cuentas (TSC).

Precisó que hasta este momento se desconoce a ciencia cierta el inicio del proyecto, tampoco se conoce a cuánto ascenderá el precio del pasaje, y por último no ha habido transparencia en el manejo de los fondos aportados por el BID y el BCIE.

Acusó al exalcalde Ricardo Álvarez de haber defraudado a la ciudad al inaugurar una obra que no está terminada y cuyo inicio todavía es incierto. “Estamos pidiendo que el informe se turne a la Fiscalía y al TSC para deducir la responsabilidad si existen actos de corrupción y mal manejo de los fondos públicos”, dijo.

A medias

En el tramo del bulevar Centroamérica la obra está concluida, pero no ha sido abierta al público porque se carece de las unidades articuladas para ponerlo a andar.

Esta situación ha generado el malestar de los capitalinos y de miles de conductores que viven y transitan en esa zona en vista que los congestionamientos se han agudizado desde que la obra comenzó a construirse.

Los motoristas se quejan que la vía utilizada para el Trans 450 ha reducido el espacio para circular y eso ha dado lugar a un aumento de los congestionamientos en las horas pico, de modo que pasar por la zona se ha vuelto un calvario para los ciudadanos.

El segundo tramo que pasa por el bulevar Suyapa y que lleva a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Unah) se encuentra inconcluso, pero las autoridades aseguran que en los próximos días se reanudarán los trabajos.

En su defensa, las autoridades locales descartaron que el Trans 450 esté paralizado y justificaron que están trabajando en la etapa de diagnóstico y diseño del tercer tramo, ya que cada uno de ellos ha sido concesionado a diferentes constructoras.

Tramos del Trans 450 (9 kilómetros):

1.- Desde el estadio Nacional “Tiburcio Carías Andino” hasta la Universidad.

2.- Desde el complejo deportivo hasta la colonia “John F. Kennedy”.

3.- Casetas: a un costado del estadio, cerca del Hospital Escuela Universitario (HEU), frente a Plaza Miraflores, frente al edificio Torre Libertad, en colonia Kennedy.

Razones por las que el Trans-450 tiene mala fama

• El proyecto fue habilitado de manera prematura: Lo que se inauguró en la administración pasada fue una terminal y no un sistema.

• El cambio y adaptación de las nuevas autoridades municipales: En la administración local, cambio de firmas y revisión de contratos.

• Hay un nuevo plan maestro vial: Éste se ha puesto en marcha durante la actual gestión, en la que se han construido obras complementarias y notables cambios de infraestructura vial.

• La legalización del predio donde se instalará el centro de operaciones del Trans-450: Se localiza a la altura de la colonia Kennedy y donde se aparcarán el 50 % de las unidades del Bus de Tránsito Rápido.