Es un pueblo muy antiguo, registros del Archivo de Indias en Madrid, España, hacen referencia de este asentamiento hacia el año de 1567. Su población aumentó por el auge de la minería en el siglo XVIII, llamándose Real de Minas de San José de los Cedros, adscrito al curato de Cantarranas.
El 29 de agosto de 1824, se reunió en Cedros el primer Congreso Constituyente del Estado de Honduras, ante la rivalidad existente entre Comayagua y Tegucigalpa, pues ambas pujaban por quedarse con la categoría de capital del naciente Estado.
Y para evitar confrontaciones se decidió instalar la Primer Asamblea de Diputados en Cedros, instalándose el primer Congreso Constituyente del Estado de Honduras. Recordando que para entonces recién se había constituido la República Federal de Centroamérica.
En 1849 se reunió en la misma ciudad un Congreso Ordinario bajo la presidencia del Lic. Felipe Jáuregui y fue entonces que se decretó que Tegucigalpa fuera definitivamente la capital del Estado.
Localizado en el centro del departamento de Francisco Morazán, al norte del valle de Siria y unos 85 kilómetros de la capital Hondureña. Consta de una extensión territorial de 750 kilómetros cuadrados. Sus calles empedradas y la frescura de sus pinares invitan al turista a compartir su cultura y su tradición.
Entre los atractivos que ofrece Cedros, además de su casco urbano, que resulta a la vista como selecta obra del más exquisito maestro de las artes plásticas. Son sus minas, que resultaron de amplia explotación durante el dominio español y producían por toneladas; oro, plata, plomo y zinc.
Se sentirá tentado a hacer un recorrido por el mirador de El Cerrito, desde ahí puede divisar sus aldeas, caseríos y sobre todo la belleza natural que lo rodea.
Aquí podrá encontrar la casa donde nació Álvaro Contreras, un célebre periodista quien dentro de los múltiples cargos que ejerció, fue Secretario General de Honduras y Director de La Gaceta en 1852.
Y uno de sus mayores «imanes turísticos», es la casa en donde tuvo lugar la instalación el célebre primer Congreso Nacional del Estado de Honduras.
Con una altura de mil metros sobre el nivel del mar, Cedros goza de una temperatura generalmente agradable, lo cual sumado a la calidez de su gente, hace que al visitarles, usted se sienta como en su propia casa.
Esos son buenos motivos para compartir la cultura y tradiciones de la zona. Una de las actividades más espectaculares es escalar “El Cerrito”, desde ahí se pueden avistar aldeas, caseríos y sobre todo la belleza natural que lo rodea.
Cedros es un lugar cafetalero, pero también sus tierras producen gran variedad de cultivos; la otra gran actividad económica fuerte de sus pobladores es la elaboración de artesanías de barro, artículos estos que resultan de muy buena calidad.
También para los días de verano, en la aldea El Suyatal, podrá encontrar diferentes balnearios que sin duda le van a agradar.
¿Usted qué opina?