La Fiscalía de Estados Unidos presentó un escrito en la Corte Federal del Distrito Sur de Nueva York, revelando las declaraciones anticipadas de cuatro testigos colaboradores en el proceso criminal contra el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández, el exjefe de la Policía Nacional Juan Carlos «El Tigre» Bonilla y el exoficial Mauricio Hernández Pineda.
Los fiscales establecieron que los testigos depondrán sobre temas adicionales y llamarán a otros testigos desconocidos hasta el momento, presentando pruebas adicionales en el juicio para demostrar los roles superpuestos en la conspiración de los acusados., en donde se incluye al exmandatario Hernández.
El primer testigo sería Mario Guillermo Mejía Vargas, un exoficial de la Policía Nacional que se entregó voluntariamente a la justicia estadounidense en 2016 y colaboró tras declararse culpable. Mejía Vargas habría trabajdo con Mauricio Hernández Pineda para proteger los envíos de cocaína de Juan Antonio «Tony» Hernández y el capo mexicano Joaquín «El Chapo» Guzmán.
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El segundo testigo es Alexander «Chande» Ardón, exalcalde de El Paraíso, Copán, supuestamente involucrado en una mega conspiración de tráfico de drogas. Después de entregarse voluntariamente a Estados Unidos, comenzó a cooperar con los fiscales y a desenredar toda una maraña que salpica a políticos y exdiputados en el cobro de sobornos.
Alexander Ardón, identificado como CW-2, habría entregado en 2009 una fuerte suma de dinero a tres diputados del Congreso Nacional para asegurar la elección de Juan Orlando Hernández como presidente de ese Poder del Estado. Tras ser electo presidente del Congreso, Hernández llamó a Ardón para garantizarle el apoyo de la policía y militares en el resguardo de los cargamentos de cocaína.
El tercer testigo es Víctor Hugo Díaz Morales, alias «El Rojo», identificado como CW-3, quien fue extraditado desde Guatemala. La Fiscalía espera que Díaz Morales declare sobre su narcotráfico y el papel de cada uno de los acusados, incluyendo la protección que Hernández Pineda proveyó para las actividades de narcotráfico de Juan Orlando y Tony Hernández.
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El cuarto testigo es Devis Leonel Rivera Maradiaga, líder del cartel de Los Cachiros y conocido como CW-4. Se espera que Rivera testifique sobre sus interacciones corruptas con «El Tigre» Bonilla y Juan Orlando, incluidos sobornos pagados a políticos y empresarios hondureños a cambio de protección y asistencia para su narcotráfico y actividades de lavado de dinero.
La Fiscalía solicitó a la Corte someter en un solo juicio al expresidente Hernández, «El Tigre» y al exoficial Hernández Pineda. La determinación de separar los juicios será tomada en las últimas horas por el juez federal Kevin Castel.
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