Son tres menores de edad que habían sido reportados como desaparecidos de sus casas, ubicadas en los bordos de Río Blanco .
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Los niños, dos de 10 años y uno de 13, en “gavilla” habían decidido abandonar sus casas, ubicadas en los bordos de Río el día anterior a su localización, en los bordos de El Pedregal, justo en el momento en que se realizaba el desalojo en esta comunidad.
Lea También: EN PERSPECTIVA: Niños inician a trabajar desde los cinco años en HondurasLa denuncia ya había sido interpuesta por los padres de familia ante la policía, al temer que los peor hubiera sucedido a sus vástagos. Sin embargo un conocido que los avistó en El Pedregal, fue quien dio el aviso.
Los infantes #NoAlMalTratoInfaltil tienen en común que no les gusta asistir a la escuela, incluso ya se habían retirado de las aulas de clase, para el caso don José Barnica, uno de los progenitores dijo que “Mi hijo estudia, pero a veces tiene intención de salirse del dominio de los padres por malas influencias”.
Lea También: Autoridades sin pistas de los jóvenes fugados del Centro RenacimientoMientras que doña María del Carmen Herrera, madre uno de los niños #NoAlMalTratoInfantil de 10 años, declaró que “es la primera vez que mi hijo se va de la casa, solo fue medio año a la escuela porque no le gusta estudiar, ellos tres siempre salían juntos”.
Con este panorama, a las autoridades son les quedó otra opción que decidir no entregar los infantes a sus familiares y mejor remitirlos a la fiscalía por considerar que se encontraban en riesgo social, así la decisión quedó en manos de un juez.
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