El portugués estaría enfrentando un problema legal que podría terminar con una visita a prisión.
La celebración del gol que ayudó al triunfo de Juventus por 2-0 contra Udinese en la tarde del sábado, le duró poco a Cristiano Ronaldo.
El diario alemán Der Spiegel reveló un documento según el cual el goleador portugués le habría pagado 375,000 dólares a Kathryn Mayorga para que la modelo norteamericana guardara silencio y no la acusara de violación. CR7 y la mujer tuvieron un encuentro en Las Vegas, en 2009.
El documento revelado por el diario alemán proviene de Football Leaks. Allí, Cristiano recibe el seudónimo de Topher. El acuerdo tiene fecha del 12 de agosto de 2010, y dice que el portugués le dio a Mayorga un análisis de HIV para la tranquilidad de la mujer, lo cual revelaría una relación sexual sin protección.
Además, el diario también filtró una supuesta disculpa de Cristiano Ronaldo a la joven, a quien habría forzado a tener una relación anal “brusca y precipitada”.
Según Der Spiegel, Mayorga decidió romper el contrato hace unos días y reactivo la denuncia por violación. El diario alemán también publicó la imagen del documento presentado por la Mayorga ante las autoridades.
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El contrato obligaba a Mayorga a a destruir cualquier prueba del encuentro. También hay un cuestionario donde Ronaldo reconoce exceso de fuerza: “Se quejaba de que la forcé. Dijo no y que parase varias veces”. Tres meses después, el portugués aseguró que la relación fue consensuada.
La semana pasada se difundieron imágenes de Cristiano bailando con Mayorga en una discoteca de Las Vegas, el día de la supuesta violación. Cristiano alegó que se trataba de fake news y declaró que “se quieren hacer famosos a mi costa”, aseguró.
Según Leslie Stowall, abogado de la mujer de 35 años, Mayorga tomó la decisión de presentar la denuncia porque “el movimiento Me Too y las mujeres que se han puesto de pie y revelado agresiones sexuales, le dieron a Kathryn mucho valor y por eso decidió presentarse”.
La mujer en cuestión aseguró el episodio se produjo el 13 de junio de 2009 en el hotel Palms cuando ella y unas amigas coincidieron con el grupo de acompañantes de CR7. El jugador invitó a todos a su suite y a Mayorga a bañarse en el jacuzzi. Cuando la mujer le dijo que no tenía traje de baño, el luso le ofreció unos pantalones cortos suyos. Cuando la mujer fue a cambiarse, se produjo el ataque, según el testimonio de la modelo.
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