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Los peores y más polémicos insultos de Trump

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Las palabras y frases pasaditas de tono de Donald Trump han tenido un gran impacto, escándalo y carecen de escrúpulos. Hablamos de los peores insultos del presidente de Estados Unidos.

Trump se burla e imita a un periodista discapacitado.

Mientras contraía las manos y hacía gestos bruscos y ridículos, Trump dijo: «Tenéis que ver a este pobre tipo, diciendo uuuh, no me acuerdo de lo que dije». Se refería a un reportero de ‘The New York Times’ que sufre artrogriposis (enfermedad consiste en articulaciones o coyunturas curvas o en forma de gancho y un alcance de movimiento limitado en las articulaciones o coyunturas de las manos, las muñecas, las rodillas, los pies, los hombros y las caderas).

Trump llamó a las mujeres «cerdas, gordas, perras, y animales desagradables».

Al presidente de los Estados Unidos, no se ha olvidado del machismo y la misoginia para abonar sus polémicas. Las salidas de tono con las mujeres son una constante de Trump. A lo largo de la campaña electoral fueron muchas las mujeres que han denunciado y hecho públicos los abusos a los que fueron sometidas por el multimillonario. Lejos de arrepentirse, Trump presume de ello. Como demuestran unas grabaciones a las que tuvo acceso en exclusiva el Washington Post y en las que Trump llega a afirmar que puede hacer lo que quiera con las mujeres «porque es una estrella».

Sus gestos de desprecio hacia la mujer los hemos visto con su misma esposa Melania Trump. Cabe mencionar que el legado de Trump va dejando huella en la forma de tratar a las mujeres. Cuando corrió como pólvora que Barron Trump, hijo de Melania y Donald, ha efectuado en público desaires a su mamá.

https://www.youtube.com/watch?v=GwOwrLXs7rU

«Cuando México nos envía a su gente, no nos envía a la mejor. No los envía a ustedes. Ellos envían gente que tiene muchos problemas, y ellos traen esos problemas consigo. Están trayendo drogas. Están trayendo crimen. Son violadores. Y algunos, asumo, son gente decente».

La fijación de Trump con los mexicanos fue protagonista de su campaña. Además de su interés por el muro para evitar que lleguen a EEUU, se empeña en señalarles cada vez que tiene ocasión. Aunque para ello tenga que acusarles de narcotraficantes, criminales y violadores. Y no se queda ahí, pues apuesta a expulsar a todos los indocumentados.

«Este es un país en el que hablamos inglés, no español»

Que a Trump no le gusta la diversidad ni la mezcla de culturas ha quedado muy claro durante todo este tiempo. Y los que hablan castellano en EE.UU. sean del país que sean, no se van a librar de su desprecio.

Este ataque xenófobo no buscaba ofender solo a los latinos. Lo que no gusta a Trump: «Tenemos un país en el que para ser asimilado hay que hablar inglés, y hay que asimilarlos (a los inmigrantes)».

«Construiré un gran muro en nuestra frontera sur y haré México pague por él».

La idea de Trump es que la gente «entre en el país, pero legalmente». Tampoco le faltó tiempo para asegurar que la obra no sería problemática. A su manera: «¿Cómo construir miles de kilómetros de muro? Muy fácil, soy un constructor. Es más difícil construir un edificio de 95 plantas».

«El sueño americano está muerto. Pero si fuera elegido presidente lo traería de regreso más grande, mejor y más fuerte que nunca».

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«Amo a los méxicanos, pero México no es nuestro amigo. Ellos nos están matando en las fronteras y nos están matando en los trabajos y el comercio».

¿Contradictorio o no? «Empleo a miles y miles de hispanos. Amo a la gente, los latinos. Son grandes trabajadores, gente fantástica. Y quieren inmigración legal. Quieren ser legales. No quieren inmigración ilegal con todo ese tremendo crimen»

Una de sus frases más fuertes contra el Presidente Obama la pronunció en 2012 : «No sé cómo somos tan estúpidos y tenemos a un presidente como Barack Obama».

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«Yo le gano a China todo el tiempo. Todo el tiempo».

El republicano, que al tiempo lanza guiños a la Rusia de Vladímir Putin, quiere ventajas comerciales a cambio de mantener la actual relación con Pekín. El Gobierno chino, estupefacto en un primer momento ante los ataques del presidente electo.

«Solo puedo decir que es una manera de ganar a prueba de tontos y no puedo contarlo, pero no tiene fallos la manera en que pienso vencer a ISIS»

El impredecible Donald Trump ha dado repetidas muestras, sin embargo, de que derrotar al ISIS será una de las prioridades de su Administración, cueste lo que cueste. El presidente electo parece haber identificado con claridad el temor de los estadounidenses (y de los ciudadanos occidentales en general) a sufrir en su propio país un terror yihadista que hasta hace poco solo percibían a través de los medios de comunicación.

«¿Saben por qué son ricos? Porque tienen petróleo. Les arrebataré por completo su fuente de riqueza, que es el crudo. Los bombardearé hasta erradicarlos».

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A Donald Trump todo le da igual. Ser millonario y no sufrir desgaste por sus actos es algo que le pone fácil decir y hacer lo que quiera. Por eso no le importa ser un charlatán y cargar contra todo lo que no le gusta. Aunque para ello emplee frases racistas, xenófobas, machistas o violentas.

Algunos pensaran que es racismo, otros que fue estrategia política, otro buen grupo pensará igual que él y habrá quienes piensen que es (imagínese usted la palabra). Lo cierto es que el candidato republicano, Donald Trump dice lo que se le da la gana y “sin pelos en la lengua”.

 

 

 

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