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FBI identifica al atacante de Trump en Pensilvania ¿un joven de 20 años?

El FBI ha identificado al hombre responsable del ataque contra el expresidente Donald Trump durante un mitin en Pensilvania. Según las autoridades, Thomas Mathiew Crooks, un residente de 20 años de Bethel Park, Pensilvania, fue el individuo que disparó un fusil AR-15.

Según informes, hirió a Trump en la oreja derecha y causando la muerte de uno de los asistentes al evento, además de dejar a otros dos heridos graves en el público.

El incidente ocurrió mientras Trump se dirigía a una multitud en el estado donde ganó en las elecciones presidenciales de 2016. Crooks fue encontrado en el tejado del edificio desde donde realizó los disparos, vestido con ropa gris de camuflaje.

La identificación inicial de Crooks fue complicada debido a la ausencia de documentos personales en su posesión, lo que retrasó la confirmación de su identidad durante varias horas.

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La noticia del ataque provocó una respuesta inmediata de las autoridades locales y federales, con el Servicio Secreto actuando rápidamente para asegurar la zona y neutralizar la amenaza. La rápida acción del equipo de seguridad evitó una tragedia mayor en el evento político.

CNN reporta que el FBI abrió una línea especial para recopilar información sobre el incidente, solicitando la colaboración del público para determinar las motivaciones detrás del ataque y cualquier posible conexión de Crooks con otros individuos o grupos.

Hasta el momento, no se han revelado detalles sobre las razones específicas que llevaron a Crooks a actuar de esta manera, ni si contó con cómplices en el incidente.

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El expresidente Trump, tras recibir atención médica por las lesiones menores sufridas en el ataque, se encuentra fuera de peligro.

Las autoridades continúan investigando activamente para esclarecer completamente los detalles del incidente y garantizar la seguridad pública en el estado de Pensilvania y más allá.

Este incidente subraya la continua tensión y la polarización en la política estadounidense, reflejando la preocupación por la seguridad personal de los líderes políticos y la necesidad de medidas de seguridad reforzadas en eventos públicos de alto perfil.