Edmundo González, candidato opositor en las elecciones presidenciales de Venezuela celebradas el pasado 28 de julio, ha llegado a España en busca de asilo político, tras ser objeto de una orden de captura por el gobierno de Nicolás Maduro.
Su salida del país se concretó después de múltiples intentos de la justicia venezolana por detenerlo, ante los cuales el líder político decidió buscar refugio fuera de su nación.
González aterrizó en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid, alrededor de las 16:00 horas, a bordo de un avión de las Fuerzas Aéreas Españolas.
Lea También: Juez retrasa sentencia en caso penal contra Donald TrumpEl Ministerio de Asuntos Exteriores informó que González viajó acompañado de su esposa y del secretario de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Diego Martínez Belío. A su llegada, fue recibido por Susana Sumelzo, secretaria de Estado para Iberoamérica y el Español en el Mundo.
El Ministerio de Asuntos Exteriores también confirmó que comenzarán los trámites para la solicitud de asilo de González. “La resolución será favorable, en consonancia con el compromiso de España de defender los derechos políticos y la integridad física de los venezolanos, especialmente de los líderes de la oposición”, detalló el comunicado oficial.
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El traslado de González a España fue anunciado en la madrugada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, quien a través de un mensaje en redes sociales informó: “Edmundo González, a petición propia, vuela a España en un avión de la Fuerza Aérea Española. El Gobierno de España está comprometido con los derechos políticos y la integridad física de todos los venezolanos”.
Según fuentes, González había estado negociando su salida con las autoridades españolas en los últimos días, antes de que el Gobierno venezolano pudiera llevar a cabo su detención.
La situación en Venezuela sigue siendo tensa, particularmente en la Embajada de Argentina en Caracas, donde seis líderes opositores permanecen refugiados. El pasado viernes, fuerzas de seguridad rodearon la sede diplomática, cortando incluso el suministro eléctrico.