Cuando todo parecía que se debía dirigir todos los trabajos contra la variante Ómicron, ahora la misión sería dividir esfuerzos para hacerle frente a otra cepa de la COVID – 19 que detectaron al sur de Francia y de la cual aún no tienen datos precisos.
La nueva mutación de la COVID – 19 se detectó en Francia a principios de diciembre en un viajero que retornaba de Camerún y de acuerdo a un instituto hospitalario en Marsella hasta el momento contabilizan doce personas contagiadas con la variante a la que llamaron IHU.
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Esta nueva amenaza del coronavirus tiene 46 mutaciones y, por lo tanto, más que Ómicron, pero el impacto y si esta variante es más infecciosa que la original del SARS-COV-2, no se puede determinar con la información disponible y el poco número de casos.
Asimismo, se desconoce el origen de la misma, ya que si bien se sabe que lo hallaron en una persona que procedía de Camerún, esto no significa que se haya formado en ese país africano.
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Sin embargo, tomando en cuenta que las bajas tasas de vacunación conllevan al desarrollo de nuevas variantes y que el número de inmunizados en Camerún actualmente es del 2,4 por ciento de su población, según la Universidad Johns Hopkins de EEUU, no se puede descartar que desde esa región del mundo proceda dicha mutación.
Periodista y Redactor Web de Canal11 y Once Noticias Digital.
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