El fichaje más caro del mundo se siente frustrado como jugador del PSG y varios medios internacionales afirman que Neymar se arrepiente haber dejado la comodidad de jugar en el FC Barcelona.
Fue un paso enormemente trascendental. Neymar decidió abandonar el pasado verano el FC Barcelona convertido ya en un héroe para la afición culé. Sabía que protagonizar el ‘bombazo’ del mercado le alejaría para siempre de la parroquia barcelonista y que jamás recibiría su perdón, pero la mareante oferta del jeque y los 220 millones de la cláusula que depositaba el PSG fueron al final determinantes a la hora de tomar una decisión.
Una vez confirmado su traspaso al conjunto francés, comenzaba una nueva vida para ‘Ney’ lejos del buen clima y de la playa barcelonesa. París abría sus puertas a una de las estrellas del mundo del fútbol y el brasileño se convertía desde el primer momento en el nuevo ídolo de los ‘supporters’ de la capital.
Sin embargo en el equipo había otros jugadores de referencia, otras leyendas ya forjadas desde temporadas atrás como Edinson Cavani. El choque de ‘egos’ y de personalidades se produjo desde casi el primer momento. Aún así, la verdad es que a nivel deportivo el equipo de Unai Emery comenzó como un tiro, arrollando a sus rivales y con el tridente funcionando a pleno rendimiento.
La primera sombra se proyectó en el ya famoso encuentro frente al Girondins de Burdeos, un lejano ya 30 de septiembre. Una disputa entre Neymar y Cavani (resuelta en favor de su amigo por Dani Alves) por lanzar un penalti dio los primeros síntomas de fricción.
Otro penal de la discordía
Curiosamente, después de conseguir ‘disimular’ durante los siguientes meses, otro penalti desencadenaría un nuevo momento clave en la relación de ‘Ney’ con el vestuario y con la afición.
Ganando 7-0 contra el Dijon, el uruguayo provocaba una pena máxima. Ya había marcado su gol 156 con la elástica del PSG en el mismo encuentro (igualando a Ibrahimovic como máximo anotador histórico) y tenía la oportunidad de hacer el 157 y dejarlo como líder en solitario ante su propia afición en un marco idílico.
Pero apareció Neymar y decidió que sería él quien lo iba a lanzar y a lograr su primer póker con la zamarra parisina. A la afición no le sentó nada bien ese gesto del brasileño y contestó con silbidos. Evidentes. Después de eso, el brasileño no ha vuelto a jugar (molestias en el muslo ante el Lyon y de nuevo contra el Guingamp).
Según publica ‘L’Equipe’, esos pitos habrían provocado una reacción y una reflexión en el entorno de Neymar. Al parecer, el brasileño se arrepiente de haber tomado la decisión de dejar el FC Barcelona.
Para Neymar la liga francesa se siente demasiada dura y defensiva para su fútbol y el arbitraje es bastante permisivo sancionando algunos contactos que se puede considerar como faltas.
Aún es muy temprano para saber que decisión tomará el brasileño para la próxima temporada, ya que Florentino Pérez lo busca para ser la nueva estrella del Real Madrid, algo que puede herir de gravedad los sentimientos catalanes.
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