La Secretaría de Seguridad de Honduras ha informado que 2024 podría cerrar como el año con menor incidencia de homicidios en las últimas dos décadas, un logro que atribuyen al incremento de presupuesto en seguridad y a la implementación de nuevos operativos en barrios y colonias de todo el país.

Este cambio histórico, según las autoridades, es el resultado de una estrategia coordinada de presencia policial y militar en zonas de alto riesgo, buscando reducir los niveles de violencia generalizada en el territorio hondureño.

A pesar de los avances, el informe señala que el departamento de Colón mantiene el índice de homicidios más alto en el país, seguido de zonas como Cortés y Francisco Morazán, donde las tasas de criminalidad también son preocupantes.

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Criminólogos señalan que las armas de fuego continúan siendo un factor determinante en estas áreas, sugiriendo que una regulación más estricta sobre su posesión podría ser clave para una reducción sostenida de la violencia en estas regiones.

Wilfredo Rubio, criminólogo y analista de seguridad, subraya la necesidad de fortalecer la presencia de las fuerzas de seguridad en estos departamentos con alta criminalidad.

Según Rubio, la población necesita sentir que las políticas de seguridad realmente están marcando una diferencia en su vida cotidiana, ayudando a disipar el temor a la violencia.

La Secretaría de Seguridad asegura que mantendrá su enfoque en la disuasión de delitos violentos y la colaboración comunitaria, con la esperanza de consolidar a Honduras como un país más seguro.