El 28 de noviembre, el municipio de Catacamas, Olancho, se vio envuelto en una situación de tensión y violencia cuando un operativo policial interrumpió el velatorio que terminó en un fuerte enfrentamiento armado.
La vela correspondía a Miguel Rafael Oseguera Villafranca, un ganadero de 44 años asesinado días antes.
La misa de cuerpo presente, celebrada en la iglesia San Francisco de Asís, se convirtió en el escenario de un altercado entre civiles y policías.
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Hondureño muere en ataque armado
Oseguera fue víctima de un ataque armado el 26 de noviembre en la comunidad de El Wile, donde también perdió la vida un trabajador de su propiedad.
El violento crimen dejó conmocionados a los habitantes de la zona, quienes aún se encontraban en duelo cuando se desató el enfrentamiento en la iglesia.
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Según relatos de la sobrina del fallecido, Iris Orellana, la misa fue interrumpida por un disparo de advertencia realizado por el oficial Cristian Nolasco, quien apuntó a las llantas de un vehículo cercano.
Enfrentamiento en Catacamas
El operativo de la Policía Nacional tenía como objetivo verificar permisos de portación de armas en el lugar, pero la intervención fue recibida con resistencia por parte de algunos civiles, lo que elevó aún más la tensión en el área.
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El altercado fue capturado por el oficial Cristian Nolasco, quien no dudó en sacar su celular para grabar el hecho.
En el material gráfico se puede observar la oposición de los civiles y la acción del uniformado, quien les recordó no tenía miedo a morir con tal de hacer cumplir la ley.
