La ex primera dama de 66 años, había sufrido un derrame cerebral el 24 de Enero. Tras varios días en el hospital, los médicos le diagnosticaron «ausencia de flujo cerebral». La familia autorizo el proceso correspondiente para la donación de órganos.
Por su parte, Lula ha publicado en su perfil en Facebook un mensaje agradeciendo «todas las manifestaciones de cariño y solidaridad recibidas en los últimos 10 días para la recuperación» de su esposa Maria Letícia Rocco.
El estado de salud de la antigua primera dama se había complicado en las últimas horas, según había informado el hospital en su último parte médico, tras haber constatado que no tenía «flujo cerebral».
La esposa del ex-presidente brasileño, de 66 años, tuvo que ser sometida la semana pasada a una cirugía endovascular para reparar un aneurisma.
Rocco era la segunda esposa de Lula, con quien contrajo matrimonio en 1973 cuando ambos eran viudos, y participó junto a su marido en la fundación del PT, en 1980, junto a un centenar de sindicalistas e intelectuales de izquierdas.
Anoche, los médicos que la atendían en el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo reconocieron que estado ya era «irreversible». Lula, quien baraja la posibilidad de volver a ser candidato a la Presidencia de Brasil en 2018, está en serios problemas con la justicia, que en los últimos meses ha abierto cinco causas penales en su contra por supuesta corrupción, y en tres de ellas su esposa ha sido incluida entre los acusados.
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