Las revelaciones del Cachiro evidenció la presencia del narcotráfico en las vías terrestres hondureñas
De acuerdo con fuentes estadounidenses especializadas en el tráfico de drogas en el territorio nacional, en los últimos años el trasiego mayoritario de estupefacientes a Honduras ha sido por la vía marítima y un menor porcentaje por aire y tierra. Con las declaraciones de Devis Leonel Rivera Maradiaga, se han aclarado las rutas que los capos han utilizado con la complicidad de los funcionarios y militares hondureños. El Secretario de Seguridad Nacional de los Estados Unidos, John Kelly, mencionó en su momento que las rutas del narcotráfico en Honduras y en Centroamérica variaron, y que el 80 por ciento de la droga que ingresa al país centroamericano era introducida por el mar y apenas un 20 por ciento por aire y tierra. Las investigaciones en torno al flagelo de la narcoactividad identificaban a los cárteles de Los Cachiros y los Valle Valle como las bandas delictivas que se dividían el territorio, sin embargo, Devis Leonel confesó en un tribunal que tenían lazos estrechos entre ambas organizaciones. Por otra parte funcionarios de seguridad internacionales pronosticaron que los narcotraficantes utilizarían rutas de tráfico a través del Caribe debido a la presencia de fuerzas de seguridad en el Triángulo del Norte.
¿En cuánto se estimó el capital de Los Cachiros?
Su fortuna fue valorada entre los 500 y 800 millones de dólares. Supuestamente obtenidos con la distribución local de cocaína, el tráfico de personas y posiblemente otras actividades delincuenciales en su área de influencia. Cabe señalar que a los Rivera Maradiaga nunca se les imputó cargo alguno por parte de las autoridades hondureñas en más de una década siendo varones de la droga en gran parte del territorio nacional, según el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. “Los Cachiros se tomaron el control de algunas de las rutas de cocaína más importantes en el istmo. Colón tiene una ubicación estratégica a lo largo de la costa noreste: al oriente se encuentra el departamento de Gracias a Dios, y al sur está Olancho. Estos tres departamentos se han convertido en algunas de las mejores áreas para el aterrizaje de pequeñas aeronaves que traen droga de Suramérica, en parte debido a la infraestructura dejada por la economía agroexportadora que alguna vez floreció en la zona. Hay poca presencia estatal y vastos tramos de tierra que se usan para crear campos de aterrizaje clandestinos provisionales”, relata un informe del medio InSight Crime.
¿Rutas terrestres para el tráfico de droga?
La zona costera noreste donde operaban Los Cachiros abarca los departamentos de Colón, partes de Gracias a Dios y Olancho, se extiende hacia la ciudad de San Pedro Sula y al occidente hondureño.
El Cachiro mencionó la semana pasada en la Corte Federal de Nueva York que trasportaron en dos ocasiones camiones cargados de droga. En una ocasión llevaron un cargamento desde la ciudad turística de Puerto Cortés (utilizando la carretera CA-5) y lo llevaron hacia el occidente, específicamente el municipio de La Entrada, Copán. También testificó que llevaron droga desde el municipio de Tocoa, Colón, (utilizando la calle CA-13) hasta llegar a la referida ciudad del occidente, ambas operaciones con el cártel de los Valle Valle.
“También hay grandes extensiones de plantaciones de palma africana y otros negocios agroindustriales que ayudaron a camuflar el almacenamiento y movimiento de productos ilícitos. Además, la costa recibe drogas por mar, transportadas por lanchas rápidas y barcos pesqueros”, reza un informe del especializado portal. El exjefe de Los Cachiros detalló, como ya había transcendido, que existieron numerosos contratos entre empresas controladas por los Rivera Maradiaga y el Fondo Vial, (autoridad de carreteras, ente gubernamental responsable de administrar la construcción y el mantenimiento de las autopistas, puentes y túneles del país). Los contratos entre las empresas de Los Cachiros y el Fondo Vial que ocurrieron entre 2010 y 2013, totalizaron algo más de US$4 millones (84.751.000 Lempiras). Incluyeron tramos de carreteras entre tres departamentos: Colón, Olancho y Yoro. Los contractos cubrieron reparaciones “de emergencia”, construcción de carreteras y la construcción de un puente. (Todo esto lo declaró Rivera Maradiaga en su testimonio completo y reveló que pagó en al menos tres ocasiones, cantidades millonarias al expresidente Porfirio Lobo Sosa).
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