Un halo de misterios envuelve el caso de la enfermera, Keyla Martínez, que el pasado fin de semana fue encontrada sin vida en una celda policial.
Según informe de la Policía Nacional, las autoridades apostadas en el municipio de Intibucá detuvieron a la victima horas antes de su muerte, debido a que infringía el toque de queda interpuesto.
La joven de 26 años de edad, era estudiante de enfermería en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y le faltaba solo un año para poder graduarse.
El incidente ocurrió cuando transcurría la media noche del sábado y la familia así como diferentes organismos de derechos humanos, exigen que se esclarezca por medio de una investigación, el supuesto caso de suicidio.
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Su detención fue realizada a eso de las 11:30 del sábado y diez minutos después la ingresaron en una bartolina, de acuerdo al Subcomisionado departamental de policía, Melvin Alvarenga, «fue aprehendida luego de una denuncia en la que se informaba de un grupo que se encontraba bebiendo en la calle».
A las 3:30 de la madrugada del domingo, uno de los agentes descubrió a Keyla supuestamente moribunda y asfixiada atada del cuello con una de sus prendas de vestir, médicos del hospital Enrique Aguilar Cerrato confirmaron la muerte.
Amigos, familiares y población lamentaron el suceso e indignados recurrieron a las redes sociales para denunciar el caso y exigir una investigación que exclarezca lo ocurrido.
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«El dolor que nos embarga es grande pero sabemos que del juicio del señor no se salva nadie, hoy te quitaron la vida mi niña querida porque sé que tuvieras los problemas que tuvieras no ibas a tomar tal decisión», publicaba Dora Rodríguez, tía de la victima.
Diferentes organismos de derechos humanos, así como organizaciones feministas del país se unieron en una sola voz para pedir a las autoridades pertinentes que se haga justicia por las sospechas de homicidio y supuesta violación sexual.
Asimismo, este lunes se han realizado diferentes protestas en lugares públicos y a las afueras de la posta policial de la ciudad de Intibucá.
La declaración policial indica que Keyla Martínez se encontraba con vida, le dieron primeros auxilios y luego falleció, sin embargo, la constancia hospitalaria sostiene que la joven llegó sin vida al centro asistencial.
El comunicado de prensa oficial de la Policía Nacional
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