El primer ataque fue hecho por un terrorista disfrazado de feligrés. El segundo ataque se dio con una minivan y el tercero con una scooter; todos fueron realizados por miembros de una misma familia, afiliada al Estado Islamico, (ISIS).
Los ataques tuvieron como blanco tres iglesias en Surabaya, la segunda ciudad más grande de Indonesia, mientras los devotos se reunían entre los servicios el domingo por la mañana, la policía dijo que había sido obra de una familia: una pareja había llevado a sus cuatro hijos a un alboroto que se quitó la vida y mató al menos a otras siete personas.
El Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad de los ataques, según la agencia de noticias Amaq. En un boletín inicial, el grupo describió cada uno de los bombardeos consecutivos como una operación de «martirio». En una publicación posterior, más larga, el grupo identificó tres modos de ataque, entre ellos un coche bomba, un chaleco suicida y una bomba transportada por una motocicleta.
Al menos 13 personas murieron y 41 resultaron heridas en los atentados en la ciudad de Surabaya, de acuerdo con la policía. Los atentados ocurrieron un día después de que un hombre en París gritara: «Dios es grande», en árabe mató a una persona con un cuchillo e hirió a otras cuatro. Horas más tarde, el Estado Islámico se atribuyó también la responsabilidad de ese ataque.
Un día después, Amaq dio a conocer un video de teléfono celular del atacante prometiendo lealtad al líder del Estado Islámico, Abu Bakr al-Baghdadi, y pidiendo a los partidarios del Estado Islámico en Francia, Alemania, el Reino Unido y en otros lugares que también lleven a cabo ataques.
Más de 41 personas más fueron heridas en el ataque en Indonesia por los terroristas suicidas, dijo Frans Barung Mangera, un portavoz de la policía. Mangera dijo que las bombas habían sido detonadas en diferentes partes de la ciudad en cuestión de minutos.
Afirmó que las víctimas incluían fieles que entraban y salían de las iglesias entre servicios. Dos policías también se encontraban entre las víctimas.
El jefe de policía de Indonesia, Tito Karnavian, identificó a los atacantes como Dita Oepriarto y su esposa, Puji Kuswati. El jefe de policía dijo que dos de sus hijos, de entre 18 y 16 años, también habían estado involucrados. También se vieron a dos niños más pequeños en compañía de la mujer en un sitio de bombardeo, dijo la policía.
Las imágenes publicadas en YouTube muestran lo que parece ser uno de los atacantes en una motocicleta que de repente apaga una calle y acelera hacia una iglesia antes de explotar.
La policía dijo que el padre, conduciendo una minivan Toyota, había dejado a la madre y los dos niños más pequeños, de entre 12 y 9 años, en la Iglesia Cristiana de Indonesia. Allí, según Kumparan News, un sitio de noticias en línea, que cita al subjefe de la policía de Surabaya, la mujer intentó ingresar por la fuerza a la fuerza después de ser detenida por un guardia de seguridad.
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