La sentencia a 12 años de prisión queda firme según decisión de la Corte de Apelaciones de lo Penal de Francisco Morazán, esto por haberla encontrado culpable en el delito de lavado de activos en el sonado caso del megafraude al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
Ilsa Vanessa Molina cumple su condena de 12 años 3 meses en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), de los cuales ya ha cumplido dos años.
La imputada fue condenada mediante procedimiento abreviado desde el 5 de diciembre de 2016, declarándose culpable de haber blanqueado casi 10 millones de lempiras a través de esta empresa “de maletín”, denominada, Insumedic; no obstante, su defensa privada había interpuesto un Recurso de Apelación con el que pretendía modificar la pena contra ella dictada, lo que fue declarado “Sin Lugar” por el Tribunal de Alzada, valorando así las circunstancias agravantes que planteó el Ministerio Público en este expediente, cuya sentencia adquiere ya el carácter de firme.
En el caso Insumedic-IHSS, miles de folios de prueba documental y pericial demostraron cómo Ilsa Vanessa Molina Aguirre participó en el desfalco del IHSS, valiéndose de la relación sentimental que ésta mantenía con el entonces gerente de Compras, Materiales y Suministros, José Alberto Zelaya Guevara, actual prófugo de la justicia.
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