En los próximos días los representantes de la empresa privada y de las centrales obreras tendrán la última oportunidad de llegar a un acuerdo para fijar el nuevo salario mínimo.
De acuerdo a lo manifestado por el dirigente obrero, José Luis Baquedano, la comisión de negociación del salario mínimo envió una nota al ministro de Trabajo, Olvin Villalobos, para reunirse nuevamente y ver si se puede llegar a un acuerdo.
Baquedano señaló que, de no llegar a consenso con los empresarios, se debe cerrar el proceso y mandarle el acta al Poder Ejecutivo, para que sea el gobierno el que tome la decisión de fijar los porcentajes del aumento.
La propuesta de las centrales obreras es que el incremento al salario mínimo sea de entre 4 y 6%, sin embargo, esperan que, si al final la decisión recae en el gobierno, este fije una cantidad de acuerdo a los parámetros económicos.
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Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Industriales, Fuad Handal, afirmó que el esquema de negociación no es el correcto, y que la formula para calcular los nuevos sueldos debe estar basada en indicadores como la competitividad empresarial de Honduras.
El empresario sampedrano es del criterio de que la decisión del nuevo salario mínimo no debe ser política ni populista, sino basada en la situación financiera del país.
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