El cuerpo del niño que murió mientras cruzaba el Río Bravo, ubicado en la frontera entre México y Estados Unidos, será repatriado en los próximos días.
El compatriota respondía al nombre Anderson Gabriel Vindel, de apenas 9 años.
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Después de este trágico suceso, las autoridades identificaron a los padres y los deportaron desde Eagle Pass hasta el territorio hondureño.
De acuerdo a relatos, elementos del Grupo Beta lograron sacar del agua al pequeño pero ya se encontraba inconsciente.
Asimismo, los rescatistas intentaron reanimarlo con los primeros auxilios pero desafortunadamente lo declararon muerto en el lugar.
El infante había emprendido la travesía hasta el país del norte junto a sus padres y una hermana, y al intentar cruzar el río la corriente los arrastró y todos quedaron separados.
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La Patrulla Fronteriza localizó al padre y a la menor de 5 años, mientras que la madre logró cruzar por su propia cuenta.
Los padres de niño, Alba Alejandra Vindel Carrasco de 25 años y Alex Ramírez Antunez de la misma edad, junto a la menor de 5 años retornaron al país
De esta manera, mediante el consulado de Honduras se realizarán los trámites correspondientes para repatriar a la familia con el cuerpo del pequeño Anderson Gabriel.
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