La temporada de lluvias está cada vez más próxima, y con ello también el resurgimiento de los momentos de zozobra y nerviosismo entre la ciudadanía que reside sobre todo en el Valle de Sula, pues los estragos dejados por ETA e IOTA en 2020, desnudaron la vulnerabilidad que impera en la zona cuando se presentan fenómenos de esta magnitud.
La construcción de represas fue una de las principales solicitudes hacia las autoridades gubernamentales para contrarrestar los enormes acumulados de agua que dejan las precipitaciones, sin embargo, no existe el presupuesto para la elaboración de las mismas.
Así lo dejó entrever el ministro de la Presidencia, Ebal Díaz, quien explicó “en el presupuesto de este gobierno no, pero lo que si hay es para los estudios”.
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En ese aspecto, manifestó que la construcción de los embalses El Tablón, Jicatuyo, Los Llanitos y El Tornillito serán responsabilidad del próximo gobierno, pues este proceso tarda de tres a cinco años.
El funcionario aseveró que el retraso en la construcción de esta infraestructura en parte es por las disputas entre varios sectores que se dedican a la generación de energía.
Cabe mencionar, que el objetivo principal de estas represas será contener los aumentos desproporcionados en los niveles de los ríos Chamelecón y Ulúa.
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