El doctor Edgar José Velásquez Orellana, brindó por primera vez su declaración de los hechos sobre lo que ocurrió la noche que lo detuvieron junto a su amiga y ahora fallecida Keyla Martínez, en La Esperanza, Intibucá.
Antes de comenzar la entrevista, el doctor dejó en claro que, «no dijo nada antes por consejos de su representante legal», pero si brindó todas las declaraciones a las autoridades correspondientes.
En primera instancia, el galeno relató que a las 11:35 del día sábado, fueron interceptados por policías, quienes le solicitaron los documentos, por lo que procedió a facilitárselos.
Luego de una conversación en la que platicaron sobre que estaban incumpliendo el toque de queda, los bajaron del auto, revisaron el vehículo y les colocaron las esposas.
“Cuando nos esposaron me sentí asustado y sorprendido, les pregunté a que se debía la detención, sin embargo, nos subieron a la patrulla para llevarlos a la estación ”, contó.
Una vez en la posta policial, les quitaron algunas de sus pertenencias, recogieron sus datos y los separaron.
Orellana contó que lo colocaron en una celda oscura con 10 personas más, mientras que a su amiga la dejaron en otra completamente sola.
“Keyla estaba sola, llorando en su celda, mientras le suplicaba que la sacaran porque no había hecho nada”, agregó.
El galeno relató que un agente procedió a leerle sus derechos, por lo que les solicitó en tres ocasiones que le dieran una llamada, pero en ningún momento se la facilitaron.
Keyla amenazó con suicidarse
Tras varios minutos de tensión e incertidumbre, Edgar se percató que su amiga les solicitó a los oficiales que la dejaran ir al baño, durante ese tiempo, fueron reiteradas las ocasiones en las que suplicó que la dejaran salir.
Al escuchar sus suplicas, dijo que intentó “tranquilizarla” y pidió que le cantara una canción para hacer tiempo y “calmar la situación” hasta que los dejaran salir en horas de la mañana.
Velásquez Orellana manifestó que la joven aceptó e interpretó un par de canciones, no obstante, minutos después, reveló que la joven le dijo:
“Me quiero morir, me voy a colgar con mi suéter”.
Luego de esas palabras, el doctor y los que estaban en su celda, le pidieron que no dijera tal cosa, seguido de un silencio de aproximadamente de cinco minutos.
Ante tal situación, hizo un llamado a los oficiales para que revisaran la celda de Keyla, y fue en ese momento cuando un policía alumbró con una linterna, seguido de un aviso para que más agentes procedieran a sacarla del lugar.
Edgar reveló que vio el cuerpo de su amiga en estado inconsciente, por lo que, bajo su condición de doctor, solicitó poder revisarle los signos vitales, pero no le hicieron caso.
El doctor culminó su testimonio contando que fue hasta las 6:00 pm, cuando el subcomandante de la posta policial, le solicitó su cedula, lo dejó salir y le informó que la joven había muerto.
Finalmente, el joven galeno extendió sus condolencias a los familiares, y ofreció nuevamente su colaboración con los entes investigativos para esclarecer los hechos sobre la muerte de su amiga.
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