En plena emergencia sanitaria por la diseminación del coronavirus, los médicos se ven en la obligación de idear técnicas que ayuden a pacientes infectados a lograr una mejor respuesta contra la enfermedad.
Una de ellas que sin duda se vuelve cada día más efectiva es el “decubito prono” o “postura boca abajo”, la cual tiene el aval de la OMS, quien recomienda aplicarla de 12 a 16 horas diarias.
El mecanismo comienza a administrarse de forma más asidua en las miles de personas infectadas por la pandemia, a raíz de los múltiples beneficios que tiene para contrarrestar los efectos nocivos de enfermedades respiratorias.
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A criterio de especialistas, esta postura ayuda a los pacientes a aumentar la cantidad de oxígeno que llega a sus pulmones para que se vuelvan a expandir, y además proporciona mayor flujo sanguíneo.
La parte más pesada de los pulmones está en espalda, por lo que si el paciente está boca arriba tendrá muchísima más dificultad para respirar.
Sin embargo, es fundamental que el método lo aplique un número adecuado de profesionales de la salud con experiencia; caso contrario, se corre el riesgo de que el paciente al ser cambiado de posición pueda sufrir complicaciones, y más si padece enfermedades de base como la obesidad.
¿Usted qué opina?