Después de 45 días angustiosos, Beatriz Zimmermann finalmente recibió noticias sobre sus hijas desaparecidas, pero no buenas noticias; una de las pequeñas fue encontrada muerta en Tenerife, España.
En las últimas horas, el buque oceanográfico Ángeles Alvariño encontró los restos humanos de Olivia, de seis años, al interior de una bolsa deportiva que estaba amarrada a una ancla a mil metros de profundidad, a unos tres kilómetros de la costa de Tenerife.
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Un análisis de huellas dactilares confirmó que el cuerpo rescatado corresponde a Olivia, que fue secuestrada junto a su hermana Anna (1) por su propio padre, Tomas Antonio Gimeno.
El buque continúa con las operaciones de búsqueda en la zona, sin embargo, aún no hay rastros de Anna ni de Tomas.
Reporte desde España, gracias a la Alianza Informativa Latinoamericana
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El secuestro
Según medios españoles, el pasado 27 de abril a eso de las cinco de la tarde (hora en España), Gimeno pasó por Anna a la casa de la madre de las niñas, y su expareja, de 35 años, luego fue por OIivia a un campamento, posteriormente las llevó a su casa. Varias horas después, acudió al puerto deportivo Marina Tenerife.
Al tiempo, encontraron flotando una silla de bebés para carros, que utilizaba Anna, también se encontró una botella de oxígeno y una funda nórdica, ambos de Gimeno.
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La madre de las menores denunció que su expareja le dijo días antes de secuestrarlas, que jamás volvería a ver a las niñas y tampoco a él. Familiares de la joven aseguraron que Tomás se encontraba molesto porque su ex tenía un nuevo amor.
La búsqueda de padre e hija continuará con el buque de alta tecnología, por lo menos hasta el lunes, anunciaron autoridades, sino se buscará con equipo aún más especializado.
La escalofriante tragedia ha conmocionado al mundo entero.
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