Tal como estaba previsto, los republicanos de Trump mantienen su hegemonía en el Senado, mientras que el Partido Demócrata hace lo propio con la Cámara de Representantes.
Los demócratas alcanzaron los 23 escaños necesarios para hacerse con la mayoría en la Cámara Baja, al derrotar a los republicanos en estados clave como Virginia, Florida, Pensilvania y Colorado.
Pero los republicanos contraatacaron en el Senado, en donde recuperaron al menos dos escaños, en Indiana y Dakota del Norte, y retuvieron otros dos que permanecían en riesgo en los estados de Tennessee y Texas.
Hasta el momento, 383 de los 435 escaños de la Cámara ya han sido ocupados, 186 por republicanos y 199 por los demócratas. En Virginia, la actual congresista del Partido Republicano Barbara Comstock perdió su escaño en la Cámara de Representantes por el distrito 10 del estado ante la demócrata Jennifer Wexton.
Esa carrera, en un distrito suburbano del norte de Virginia que Hillary Clinton ganó por 10 puntos porcentuales en 2016, era considerada por muchos observadores como fundamental para las esperanzas republicanas de mantener el control de la Cámara Baja.
Lea También: (VIDEO) Elecciones en EEUU: Donald Trump y el racismo que usa en su campañaEn Florida, la demócrata Donna Shalala se hizo con el escaño del distrito 27, que conservaba desde 1989 la republicana Ileana Ros-Lehtinen, quien se retiró este año; mientras que la también progresista Debbie Mucarsel-Powell venció al congresista conservador Carlos Curbelo por el distrito 26.
La oposición también renovó los escaños de nueve senadores, entre estos Ben Cardin, por Maryland; Elizabeth Warren, por Massachusetts; Sheldon Whitehouse, por Rhode Island; Bob Casey, por Pensilvania, y Thomas Carper, por Delaware.
Además, Chris Murphy, por Connecticut; Sherrod Brown, por Ohio; y Tim Kaine, por Virginia, hicieron lo propio en sus respectivas batallas electorales.
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