El Estado Islámico (EI) se atribuye el atentado terrorista
Unas 42 personas murieron y decenas resultaron heridos este viernes tras la explosión de un coche bomba en la localidad de Susian, al norte de Siria, confirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
El atentado mortal sucede un día después de que el grupo yihadista fue expulsado de su último bastión en la zona.
El número de muertos podría aumentar en las próximas horas porque hay varios heridos en estado grave, añadió la fuente.
Entre las víctimas mortales hay combatientes rebeldes de la operación Escudo del Éufrates, que ayer tomaron el control con el apoyo de fuerzas turcas de Al Bab, bastión del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Alepo.
Un rebelde perteneciente al Murad Brigada Sultan cerca de al-Bab, dijo: «Fue hecho en un puesto de control, pero había un montón de familias allí reunidos y esperando para volver a al-Bab Por lo tanto tenemos muchos civiles damnificados”.
La explosión tuvo lugar junto a dos sedes de grupos rebeldes sirios, que luchan tanto contra las fuerzas del régimen del presidente Bachar al Asad como contra el EI.
Estado Islámico dijo en un mensaje de medios de comunicación social que estaba detrás del ataque, tras haber reconocido el jueves que había perdido el control de al-Bab.
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