El conjunto chileno aprovechó la falta de contundencia del equipo nipón, y los goleó 4-0 con una brillante actuación de Eduardo Vargas.
En un partido emocionante donde el resultado fue inverosímil con respecto a lo que se observó en el campo de las acciones, Chile supo imponer su titulo de bicampeón de América en el encuentro.
Las acciones de peligro iban y venían. No había descanso, definitivamente que era un juego de ida y vuelta donde ambos equipos demostraban sus ganas de triunfar.
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Sin embargo, fueron los chilenos quienes con un cabezazo de Erick Pulgar sobre el final del primer tiempo lograron irse con el triunfo a los camerinos.
La parte complementaria tuvo la misma intensidad, y fue al minuto 51 que Eduardo Vargas la clavó en el arco con un poco de fortuna pues se desvió en un defensa rival.
Ante la adversidad, los japoneses salieron a buscar el gol del descuento pero no lo alcanzaron gracias a la mala puntería al momento de definir.
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Finalmente, nuevamente Vargas y Alexis Sánchez en un lapso de dos minutos liquidaron el encuentro y la mejor cara de Chile desde que Reinaldo Rueda asumió la dirección técnica.
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