Autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP) confirmaron este sábado la fuga de 22 peligrosos pandilleros del principal reclusorio de Honduras, Marco Aurelio Soto.
Se descubrió que unos 22 reos se fugaron de la penitenciaría nacional Marco Aurelio Soto, localizada en Támara, Francisco Morazán, en la huida habría resultado un muerto.
Según información proporcionada en conferencia de prensa, la fuga se registró el pasado jueves en horas de la madruga, pero que fue hasta ayer que se percató que no estaban los 22 privados de libertad.
Se conoció que esta cárcel cuenta con tres anillos de seguridad, situación que hace preguntarse en el cómo estos privados de libertad burlaron los mismos y lograron un escape que está provocando mucho temor en la población.
Esta fuga masiva se da luego de que las autoridades confirmaran que se trasladarían a unos 1,000 privados de libertad a la nueva cárcel de máxima seguridad conocida como “El Pozo II”.
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Trasciende de manera NO OFICIAL la lista de los posibles reos fugados:
Las autoridades del INP dijeron que hasta mañana darán a conocer la lista oficial de los fugados
El pasado viernes también se fugaron dos reclusos del Centro Penal de Choluteca, los prófugos fueron identificados con los nombres de José Luis Rodríguez Cubas, alias el “Z” y Juan Misael Martínez Zepeda.
A esto se le suma a la fuga de 10 internos del centro de reclusión para menores «Renacer», de los cuales uno de ellos era miembro de la pandilla 18 y estaba implicado en el crimen del periodista Igor Padilla, asesinado el pasado 17 de enero.
El domingo anterior también se registró un intento de fuga que se marcó más por lo jocoso cuando un interno evadió varios filtros de seguridad disfrazado con una falda larga, blusa, zapatos de tacón, una peluca rubia y unos grandes lentes oscuros.
Este interno de nombre Francisco Román Herrera, llegó hasta el portón principal, último escaño para salir del recinto, los custodios notaron aspectos raros en la «mujer» que se identificó con el nombre de Jacinta Elvira Araujo, a quien le pidieron que se quitara los lentes y luego lo trasladaron a la Dirección para dar parte a los superiores.
Se estima que sólo un 20% de los prófugos es recapturado en Honduras, sin embargo, se les atrapa cuando han vuelto a cometer delitos.
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Cabe señalar que las autoridades han realizado dos traslados masivos de reos a la cárcel de Ilama Santa Bárbara, más conocida como “El Pozo”, entre los trasladados se encontraban integrantes de la MS 13 y la pandilla 18, además se trasladaron a varios reclusos denominados paisas.
Estas acciones habrían ayudado a disminuir el flagelo de la extorsión, afirman las fuerzas de seguridad.
Para el candidato a la presidencia Luis Zelaya, los traslados masivos a las cárceles de máxima seguridad han sido un “show mediático”.
Zelaya acusó a las autoridades penitenciarias de ser los responsables que los centros penales se hayan convertido en ” un lugar con privilegios para los reclusos y no en centros de rehabilitación como debe ser” .
Y tajantemente expresó que todos los lujos y otros objetos prohibidos a quienes guardan prisión, así como armas, celulares y drogas, “no entran por un túnel al centro penal sino por la puerta principal a vista y paciencia de las autoridades”.
Por su parte el dirigente de Comisión de Depuración de la Policía Nacional Omar Rivera, ante el anunció oficial de la fuga de 23 reos miembros de la pandilla 18 de la Penitenciaría Nacional Marco Aurelio Soto, ubicada en Támara Francisco Morazán. Reaccionó y puntualizó que lo sucedido en el centro penitenciario es «INADMISIBLE».
«Se deben deducir responsabilidades, no solamente a las autoridades de la Penitenciaría Central de Támara, sino también a los integrantes del Instituto Nacional Penitenciario» dijo.
Rivera, también señaló que «si no fuese por el interés que directamente ha mostrado el Presidente de la República y el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, con esas iniciativas de construcción del «El Pozo» y «La Tolva», a saber que sería hoy en día de esos privados de libertad de alta peligrosidad que estaban en las cárceles ordinarias del país.
Reacción de Omar Rivera.
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