La presentadora de televisión, Karla Villaroel, les envió un contundente mensaje a todas las personas que se han burlado de ella por vender sándwiches durante los fines de semana.
Esto se debe a que hace unos días unas fotografías de ella junto a su puesto de comida se hicieran virales.
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La periodista de Bolivia se dedica a vender vender empanadas y sándwiches durante los fines de semana mientras no trabaja frente a las cámaras.
Las imágenes desataron controversia entre los internautas que cuestionaron si en su trabajo no le pagaban lo suficientes y criticaron la acción.
En este sentido, la comunicadora no perdió el tiempo y aclaró la situación.
“No me da vergüenza, sin miedo al éxito”, manifestó en las redes sociales.
Miles de personas han mostrado su apoyo a la boliviana, indicando que no hay que sentir vergüenza de un trabajo honradol.
“Sabía que no valía la pena y no tengo porqué explicarle más nada. Ahora yo les digo a ustedes pues no, esa no es la cuestión si da plata o no. Lo que importa son las ganas de salir adelante”, añadió en la publicación.
Asimismo, expresó que, para ella, “vergüenza es robar, ser mediocre por burlarse de las ganas que tiene una persona de salir adelante, buscando ingresos de manera honrada, con sacrificio”
Lea También: El 10% de la población de Centroamérica no puede acceder a alimentos básicosLa presentadora manifestó que ama su trabajo y que se siente muy orgullosa de ser periodista.
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